50x35 cm ~ Pintura, Oleo
Esta obra representa a un bailarín con el torso desnudo, en una pose dinámica y expresiva. Su cuerpo ligeramente inclinado y su cabello despeinado aportan sensación de movimiento a la obra . Su rostro tiene una mirada profunda e intensa que trata de transmitir fuerza y desafío. La iluminación resalta la estructura ósea de su rostro y su musculatura aportando naturalidad a este estudio de la figura humana . Es una imagen poderosa que explora la masculinidad y que busca transmitir emociones a través de la postura y la mirada.
En esta obra se ve claramente la influencia de Goya en el artista.
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